La Nueva Normalidad (una historia de amor)

Paula y Diego se conocieron cuando un amigo común montó un Zoom por su 40 cumpleaños. Pablo se enamoró en cuanto la vio en la fila de en medio, segunda pantalla empezando por la izquierda.

Más tarde, su amigo le contó que Paula había estado casada y que tenía un supertransmisor de cinco años fruto de aquel matrimonio.

Diego la buscó en Instagram y le dio like a un total de 9 fotos, la mayoría de las cuales mostraban los progresos de Paula en repostería: de la tarta de arroz a las magdalenas, de las magdalenas al tiramisú. A ella, como a él, le gustaba el filtro Valencia. Eso tenía que significar algo.

Paula le mandó un mensaje directo al día siguiente: «También cocinas?» Aquello dio pie a un animado debate sobre la progresiva extinción del signo de interrogación de apertura que Diego ilustró con un enlace a Fundéu. Paula jamás pensó que disfrutaría tanto con asuntos morfosintácticos.

Sus cuatro primeras citas fueron por Skype. Al principio, ella era tímida y se desenfocaba el fondo. Él era inseguro y se ponía delante de su única biblioteca, encuadrando a su espalda dos libros de Taschen y un coleccionable de clásicos de la literatura que regalaron con El País en los años 90. Con el paso del tiempo, los dos fueron ganando en confianza y sinceridad.


El cuento completo, aquí.